Un texto de amor y solidaridad y un vídeo con la lectura de mi primer libro Comienzos y Finales para todas aquellas personas que han perdido un ser querido en este 2020
Por: Liliana Arias
Hace unos días me cruce con una amiga en la calle y en sus ojos por un minuto pude ver reflejada toda la tristeza, la desgracia y la contradicción que ha ocasionado en el mundo el virus durante este 2020. Su dolor no solo era propio, sino que traía el desencanto que ha emergido en todos nosotros mes tras mes. Su hermana se fue de su vida sin un adiós, su vida se escapó en medio de una pandemia que no se sabe con certeza de dónde salió pero que ha llegado hasta nosotros y nos ha tocado profundamente, cambiando los cimientos de nuestras vidas.
El dolor ha copado su alma. Sus lágrimas ahora entiendo que no sólo se vierten por sus mejillas, sino que ruedan presurosas por miles y miles de rostros que han perdido en este plano físico a sus seres queridos en una historia repetitiva, donde las cifras de fallecidos por COVID crecen para alimentar las estadísticas pero dejan el profundo vacío de una partida sin retorno.
Hoy a punto de terminar el año son pocas las conclusiones que podemos sacar de esta situación porque aún estamos inmersos en esta pandemia y por eso hoy mi corazón se une a ese dolor por la pérdida de tantos seres queridos que como aves en bandada hoy iluminan el cielo con su presencia. Lo cierto es que el tiempo pasa pero no terminamos por acostumbrarnos a la ausencia física. Los recuerdos se van volviendo leves, lejanos como las lágrimas que se evaporan en el aire pero que convertidos en lluvia tocan una y otra vez nuestra cara cuando menos los pensamos.
Seguimos en este mundo, y la fuerza de la vida nos ha llevado por caminos inesperados. Y entonces entendemos que el amor es la única fuerza que nos conecta más allá de la vida y de la muerte. Que es ese sello, esa impronta que cierra el pergamino de nuestras vidas para hacerlas auténticas y verdaderas. El amor remueve, taladra, transforma y es la fuerza que todo lo une de una manera milagrosa.
Dice Thích Nhất Hạnh en su libro El arte de vivir que a veces cuando miramos al cielo vemos una hermosa nube…al poco tiempo volvemos a mirar y la nube ya no está. Podemos pensar que la nube desapareció pero no es así…esa nube se convierte en agua…va a los ríos y luego al mar. Así la nube no muere sino que se transforma. Así sucede con nuestras vidas…la muerte no es el final, la muerte es un paso, un nuevo estado del alma que vuelve a Dios, la fuente del amor!!!
El propósito de una vela es convertirse completamente en una llama.
En ese momento de aniquilación
No tiene ninguna sombra.
No es más que una lengua de luz
Describiendo un refugio
Fíjate en este tocón de vela a punto de consumirse
Al igual que una persona que por fin
Esta a salvo de virtudes y vicios
Y del orgullo y de la vergüenza
Qué a estos les exigimos.
Rumi
El mensaje que quiero dejarles a todos los que han perdido sus seres queridos durante este año a causa o no del virus es que no están solos. Que no somos islas individuales experimentando el dolor. Nos acompañan nuestros guías espirituales, ángeles y ancestros. Ellos se encargan de enjugar nuestras lágrimas y junto con el gran amor de los seres que fallecen nos dan la fuerza para continuar.
Eso lo he experimentado hace años atrás con la muerte de mi madre y de mi hermano y les puedo decir que el dolor me ha llevado a transformarme y a buscar en mi interior respuestas para encontrar el verdadero sentido de la muerte, su propósito arrasador para sacar todas las luces y sombras que me habitan.
Y creo que el poder redentor de la escritura ha sido decisivo en esos momentos. Por eso he preparado para todos y todas mis amigos, conocidos y desconocidos un vídeo con la lectura del primer libro que publiqué Comienzos y Finales. Con el propósito de que ese mensaje llegue hasta ustedes para decirles que la muerte hace parte de la vida y que cuando cumplimos con la misión que hemos venido a realizar, nuestra alma vuela libre para transformarse y regresar a su hogar. Todas las vidas valen la pena porque hacen parte de un plan Divino de crecimiento y evolución.
Comienzos y Finales es la historia de los primeros rayos de sol y del ocaso, de una oruga transformándose en mariposa y una flor marchitándose, de renacuajos convirtiéndose en sapos y de los frutos maduros que se caen de los árboles, de un pájaro aprendiendo a volar y del final de los ríos cuando llegan al mar.
Es el cuento de un nacimiento y una muerte. De una abuela y de una nieta entrelazadas en un abrazo interminable, como un tejido de flores.